CFX+ Boundless Technology

Características:

• Tipo de calefacción: híbrida ;
• Cámara: cerámica;
• Refrigeración: paso de circonio;
• Rango de temperatura: 121 → 221 ℃ (al grado más cercano) ;
• Preajustes: 192, 204, 212 y 220 ℃;
• Duración de la batería: de 6 a 8 sesiones;
• Carga: USB-C;
• Pantalla: color, indicador de batería, temperatura actual, temperatura objetivo, preajustes de temperatura y cuenta atrás de apagado automático ;
• Garantía: 3 años;
• Medidas: 10,1 x 3,25 cm y 213 g.

Cuando compras un CFX+, obtienes:

• 1 x vaporizador Boundless CFX+;
• 1 cepillo de limpieza;
• 1 x accesorio agitador;
• 1 x cargador USB-C;
• 1 x manual de usuario.

Diferencias con el CFX :

• Diseño más compacto ;
• Interfaz de usuario mejorada;
• Pronto dispondremos de más información :).

Presentación en vídeo:

Prueba y revisión del vaporizador CFX+ de Boundless:

Este vaporizador no es un sustituto del CFX tras muchos años de fidelidad de este último, sino más bien una evolución.

Las mejoras en comparación con el CFX son numerosas, pero podemos empezar por el mayor defecto a nuestros ojos.

Un defecto que resulta no serlo según el punto de vista:

La calada -es decir, la cantidad de succión que tienes que hacer para conseguir una calada- es bastante ajustada, un poco más que la CFX.

La cámara sigue siendo grande y te permite vaporizar fácilmente dosis de 0,3g de hierbas secas, o incluso más.

A bajas temperaturas, por debajo de 195 ℃, es un poco frustrante ya que obliga a largas inhalaciones de 6-10 segundos para hacer vapor. Esto se debe, en particular, a una potencia calorífica ligeramente inferior a la de su hermano mayor, el CFX.

Sin embargo, a alta temperatura, permite una extracción con la boca muy cercana a una extracción de humo y -¡oh magia! - todavía hay vapor, lo que es muy raro en este tipo de vaporizador.

Los sabores se conservan bien todo el tiempo, pero se irán rápidamente a altas temperaturas , el precio a pagar por una tirada corta.

Por último, la unidad de refrigeración (donde pones la boca y por donde pasa el vapor) está bien diseñada y es muy fácil de limpiar.

Pero cuidado, no creas que hace vapor frío, dista mucho del vapor frío de la Mighty+, con la CFX+ el vapor es bastante caliente en la garganta.

Cargar las plantas es muy fácil y apenas deja residuos. En la unidad de refrigeración se esconde un dabber -un utensilio para remover- muy útil en caso de necesidad.

La autonomía está ahí, fiel al trabajo.

Por último, la CFX+ nos parece una muy buena vaporizador a este precio y puede producir enormes nubes de vapor a altas temperaturas.

Los sabores están lo suficientemente bien aprovechados como para que estemos satisfechos con este calentador por conducción.

Si te gusta este aparato, puedes ir con los ojos cerrados.